Akamai aprovecha los datos de API existentes para una detección eficaz, lo que proporciona una cobertura completa de todas las API. La implementación es sencilla y rápida, ofreciendo la información más detallada a los equipos de seguridad.
Detección continua de API — Nuestra detección permanente funciona las 24 horas del día, los 7 días de la semana, identificando nuevas API y actualizando las existentes. Esta supervisión continua proporciona a los equipos de seguridad una visibilidad inigualable, alertándoles cuando se implementa una API o un servicio nuevos.
Elimine las API en la sombra — Nuestra detección continua le mantiene informado sobre las API recién detectadas o los cambios en las existentes, eliminando así las API en la sombra. Akamai tiende un puente entre los desarrolladores y los equipos de seguridad, detectando las API en la sombra en su entorno.
Revisión de riesgos de las API detectadas — Todas las API detectadas deben inspeccionarse para determinar su situación de riesgo. Akamai examina todas las API en busca de errores de configuración y vulnerabilidades, y entiende cuáles transportan datos confidenciales, como PII.
Priorice las API confidenciales con clasificación de datos — Identifique las API esenciales que transportan datos confidenciales. Akamai etiqueta los terminales que gestionan información delicada, como PII, lo que ayuda a priorizar la seguridad de las API.
Garantizar una documentación de API completa — Akamai comprueba todas las API y genera archivos Swagger para las no documentadas. Estos archivos ayudan al proceso de documentación de la API en todos los sistemas.