Los sistemas digitales dan acceso a cualquier persona que introduzca la contraseña correcta, sin verificar la identidad de esa persona. Unas credenciales débiles y la reutilización de contraseñas aumentan de forma significativa la superficie de ataque y el riesgo para una empresa. Con todas las amenazas que existen en la actualidad, ya no basta con una autenticación de factor único, como el nombre de usuario y la contraseña. La autenticación multifactorial (MFA) proporciona un nivel adicional de verificación y seguridad; garantiza que solo los usuarios validados obtengan acceso a las aplicaciones esenciales para el negocio.
Una vez que el usuario se autentica y autoriza a través de la MFA, el inicio de sesión único (SSO) le permite iniciar sesión en todas las aplicaciones con un único conjunto de credenciales. De esta manera, se mejora la productividad, ya que no es necesario volver a confirmar la identidad en cada aplicación ni se producen problemas de sincronización entre aplicaciones. La continua toma de decisiones de acceso basada en multitud de señales, lo que incluye la MFA y el SSO en aplicaciones IaaS, in situ y SaaS, proporciona mayor protección a la empresa y comodidad a los usuarios finales.